SUBCULTURAS SATÁNICAS
Ordo Templi Satanas
Parece haber cierta resonancia inconsciente entre varios elementos en la sociedad moderna los cuales, al principio, parece que no hubiera relación alguna. Sin embargo, varias subculturas en nuestra sociedad tienen muchas cosas en común, la mayoría de ellas con una relación bastante armónica entre su imaginería y los valores básicos que exponen. Parece natural que tales fuerzas y "modas" que están, en el fondo, tan interrelacionadas entre sí, se identifique como tal, para que puedan combinarse en un esfuerzo monumental para alcanzar los objetivos y metas que representan.
Estas fuerzas, y puede haber otras que estén esperando su turno para ser reconocidas, incluye la música rock, los movimientos políticos totalitaristas, los fetiches sexuales de sumisión y disciplina (Bondage & Discipline, B&D) e interés en lo oculto y macabro tipificado en el Vampirismo, o los "góticos" y por supuesto, el Satanismo.
De éstas, la música rock tiene más imaginería Satánica que las otras. Desde el pentagrama de los Satanistas en la portada de un LP de Heavy Metal, a los motivos de sumisión sexual en letras de canciones, o a los conciertos multitudinarios que se parecen bastante a los gigantescos rallies del Partido Nazi en la década de 1930; todas esas imágenes sugieren una vasta confluencia de fuerzas que se pueden hallar a la base de cada una de las anteriores.
Los Satanistas se asocian tradicionalmente a imágenes que son comúnmente consideradas oscuras y macabras por la "sociedad". Esto no pasa de ser otro aspecto de rebeldía contra la sociedad, usando una imaginería tan anormal para lograr ciertos fines a través del impacto que puedan causar, o el factor de "shock". Son las mismas imágenes que son empleadas frecuentemente por los "fans de vampiros" y ciertas bandas musicales. De nuevo, la confluencia de imágenes es aparente.
Aunque los movimientos políticos totalitaristas no gozan de muy buena reputación que digamos, y nunca han disfrutado de la popularidad que sus líderes y seguidores desearían —o creen tener, siguen atrayendo a la sociedad occidental. Tal tendencia sugiere cierto tipo de fascinación con los Nazis y Fascistas la Europa de principios del siglo XX. Con lo cual no quiero decir que estos grupos sean admirados, per se, son objeto de un gran estudio y de escrutinio profundo que parece desproporcionado a su importancia y significado histórico.
La respuesta a la pregunta de por qué se da esto, puede tener dos alternativas. Primero, la imaginería y los rituales utilizados por los Nazis y Fascistas eran piezas de propaganda de primer orden; ya se ha sugerido antes que los Rallies de Nuremburg podrían ser considerados como gigantescos Trabajos Mágicos, enfocando y canalizando las voluntades de miles de participantes en un solo individuo y en un solo ideal. Es importante anotar que los reveses militares Nazis comenzaron justo cuando dejaron de llevarse a cabo los Rallies del Partido, y es bien sabido que la Schutzstaffel (SS) se basaban en el antiguo misticismo Teutónico de la sangre, y que sus jefes y oficiales practicaban rituales mágicos durante la guerra. Y hasta el final, las SS —la Orden Negra— eran consideradas como la definición de tropas élite por excelencia tanto por los Aliados como por el Eje.
Toda la "escena" de Sumisión y Disciplina (B&D) se puede resumir en la sumisión de un individuo a la Voluntad de otro. Es expresada en términos sexuales, en vez de lo más común, en términos económicos. Representa una especie de rebelión en y de sí misma (y siempre ha sido considerada como una "perversión" y por lo tanto lleva el estigma de lo prohibido). Este estigma parte, sin duda, de la negativa de los jerarcas cristianos a aceptar cualquier tipo de actividad sexual entre personas casadas que no sea la de la Posición del Misionero, con el único propósito de la procreación. En cuanto a esta práctica, o cualquier otra práctica sexual fetichista, el Satanisa debe recordar que la búsqueda de la indulgencia física de por sí es algo bueno, una meta que vale la pena, que debe ser alcanzada con gusto y con tesón, no importa lo que las masas puedan pensar.
La utilización de aditamentos e imaginería de éste tipo ha sido asociada con el Satanismo durante mucho tiempo, y como tal puede ser bastante útil para crear cierta atmósfera para un Trabajo Mágico. Por supuesto, como ocurre con todo, puede haber más de un medio para poder enfocar la propia Voluntad, pero si tenemos en cuenta la larga historia que asocia a las prácticas Satánicas con vírgenes encadenadas a altares, aparatos de tortura medieval y cosas por el estilo, pueden servir para cosas más útiles si se emplean para crear cierta atmósfera (o cuando se utilizan como elemento de "shock" con un periodista o algún otro miembro de la masa igual de impresionable).
Estos artículos no dejan de causar cierta reacción instintiva en personas que están poco acostumbradas a dichos objetos; la reacción instintiva es la de ver al que los lleve como alguien inherentemente dominante, aún en el ambiente social más inocente. Eso es Magia Menor en acción, la utilización de "trucos" psicológicos para influenciar el comportamiento de las personas que están en derredor. Cuando se ve a una persona joven caminando por la calle con un par de esposas colgando de su chaqueta de cuero negro, el efecto es calculado para que sea intimidante. La imagen que se refleja es una combinación de dominio (portando esposas como si fuera a colocárselas a alguien en cualquier momento), rebelión (la sola idea de que alguien pueda llevar en público y de manera tan abierta y ostentosa algo que, más que de uso policial, es considerado como un artilugio sexual, que debería dejarse para lugares más "privados"), y cierta cantidad de inpredecibilidad (si ese tipo es capaz de llevar esas esposas en su chaqueta, quién sabe qué sea capaz de hacer?) todo eso sumado a un sentimiento de intimidación; ésa es una persona con la que no te meterías.
Por tanto, el Satanista debería hacer un intento para inculcar y comprimir estas subculturas y puede que desee intentar incorporarlas a su vida Satánica. Porque no importa si sus seguidores quieran o no reconocerlo, están en la misma línea de la tendencia actual del pensamiento Satánico, y como tal, deberían vernos como una especie de primos lejanos. Acaso esto hará un Satanista de un músico de rock, un fan de Ann Rice o alguien en B&D? Seguramente no. Pero si muestra un aumento considerable de las fuerzas del lado oscuro del hombre.