Virtudes Satanicas

 

El satanismo es una religión y filosofía que se enfoca en la libertad personal, la autonomía moral y la valoración de la individualidad. Una de las características distintivas del satanismo es su énfasis en las llamadas "virtudes satánicas", un conjunto de valores que se consideran importantes para los seguidores del satanismo. En este artículo, exploraremos el significado de estas virtudes y cómo se aplican en la vida diaria.

1. La indulgencia: La indulgencia se refiere a la idea de que los individuos deben buscar placer y satisfacción en sus vidas. Los satanistas creen que la vida debe ser vivida al máximo y que la restricción excesiva puede llevar a la infelicidad y la insatisfacción. En lugar de negar los placeres mundanos, los satanistas abogan por una vida plena y satisfactoria.

2. La sabiduría: La sabiduría se considera una virtud satánica porque los satanistas valoran el conocimiento y la educación. Los seguidores del satanismo creen que es importante buscar el conocimiento y la comprensión del mundo que nos rodea. La sabiduría también implica la capacidad de tomar decisiones informadas y racionales en la vida.

3. El coraje: El coraje es otra virtud satánica importante. Los seguidores del satanismo creen que es importante tener el coraje de vivir de acuerdo con sus propias convicciones y valores, incluso cuando esto puede ser difícil o impopular. El coraje también implica ser valiente en la defensa de los derechos y libertades personales.

4. La compasión: Aunque a menudo se asocia con la religión cristiana, la compasión también es una virtud importante en el satanismo. Los satanistas creen que es importante tener empatía y compasión por los demás, especialmente aquellos que son marginados o discriminados en la sociedad. La compasión también implica tratar a los demás con justicia y equidad.

5. La autoconfianza: La autoconfianza es una virtud satánica importante porque los seguidores del satanismo valoran la individualidad. Los satanistas creen que es importante tener confianza en uno mismo y en las propias habilidades y talentos. La autoconfianza también implica no depender de la aprobación o validación de los demás para sentirse bien consigo mismo.

6. La creatividad: La creatividad es otra virtud satánica importante porque los satanistas valoran la originalidad y la individualidad. Los seguidores del satanismo creen que es importante expresarse a sí mismos de manera creativa y encontrar nuevas formas de abordar los problemas y desafíos de la vida.

Las virtudes satánicas son un conjunto de valores importantes para los seguidores del satanismo. Estas virtudes incluyen la indulgencia, la sabiduría, el coraje, la compasión, la autoconfianza y la creatividad. Al vivir de acuerdo con estas virtudes, los seguidores del satanismo buscan encontrar significado y propósito en sus vidas mientras mantienen su autonomía moral y libertad personal.

Virtud del Luciferianismo

El luciferianismo es una filosofía religiosa que se enfoca en la búsqueda del conocimiento, la libertad y el autoempoderamiento. Esta corriente de pensamiento ha sido influenciada por diversas tradiciones espirituales y filosóficas, y se ha desarrollado a lo largo de los siglos. Aunque a menudo se ha malinterpretado como una corriente satánica, el luciferianismo tiene una serie de virtudes que pueden ser beneficiosas para aquellos que buscan la iluminación y el autoconocimiento.

Una de las principales virtudes del luciferianismo es la importancia que se le da a la individualidad y la libertad personal. Los seguidores del luciferianismo creen que cada persona es un ser divino con su propia voluntad y su propio camino hacia la verdad. En lugar de seguir ciegamente dogmas religiosos o creencias establecidas, los luciferianos buscan su propio camino hacia la iluminación y el autoempoderamiento. Esta virtud puede ser beneficiosa para aquellos que buscan una mayor autonomía y libertad en sus vidas, y que desean encontrar su propia verdad en lugar de seguir las creencias establecidas por otros.

Otra virtud del luciferianismo es la importancia que se le da al conocimiento y la búsqueda de la verdad. Los luciferianos ven el conocimiento como una herramienta para la liberación y el autoempoderamiento, y creen que la verdad debe ser buscada por encima de las creencias establecidas. Esta virtud puede ser beneficiosa para aquellos que buscan una mayor comprensión del mundo y de sí mismos, y que desean encontrar su propia verdad a través de la exploración y la investigación.

El luciferianismo también promueve la virtud de la rebelión contra la autoridad y las creencias establecidas. Los seguidores del luciferianismo ven la religión y las creencias establecidas como limitantes para el desarrollo humano, y creen que es necesario desafiar las normas establecidas para alcanzar la libertad y el autoempoderamiento. Esta virtud puede ser beneficiosa para aquellos que buscan desafiar las normas establecidas y encontrar su propio camino hacia la verdad y la iluminación.

El luciferianismo tiene una serie de virtudes que pueden ser beneficiosas para aquellos que buscan la iluminación y el autoconocimiento. La importancia que se le da a la individualidad y la libertad personal, el conocimiento y la búsqueda de la verdad, y la rebelión contra la autoridad y las creencias establecidas son algunas de las virtudes más destacadas del luciferianismo. Aunque a menudo malinterpretado, el luciferianismo puede ser una fuente de inspiración para aquellos que buscan una mayor autonomía, libertad y comprensión del mundo y de sí mismos.

LOS 6 PRINCIPIOS DEL SATANISMO PRÁCTICO

El satanismo promueve el conocimiento y la duda basada en un pensamiento racional y no en creencias absolutas basadas en fe.

El satanismo promueve justicia real y no una basada en códigos morales obsoletos.

El satanismo promueve la meritocracia, pues cada uno debe ser dueño de sus acciones y los resultados que estás generan.

El satanismo promueve el cuidado de los niños, pues sabe que en ellos se encuentra el presente y el futuro

El satanismo promueve la ciencia, pues solo esta genera el conocimiento que mejora su vida de forma tangible.

El satanismo promueve una sana egolatría, pues si no existe el amor a uno mismo no se puede generar amor por las personas que nos importan.

SÓLO YO SOY RESPONSABLE

SÓLO YO SOY RESPONSABLE

Soy mi maestro y soy mi Dios porque no sigo a dioses que no sean yo mismo. No externo culto a nada ni a nadie más que a mi persona, mi ego, mi proceder y a todo aquello que me construye pues entiendo que sólo yo soy responsable de cuanto me procuro para mí mismo, para mi crecimiento personal o para mi declive, nadie más que yo es responsable de esto.

El diablo no me tentó, ni dios me ayudó en nada hice lo que hice en el pasado y hago lo que hago ahora mismo por decisión propia; sólo yo soy responsable de cuanto me procuro para satisfacción de mi persona y de aquellos que me importan al rededor mío.

Sólo a la causalidad responde cada efecto así en la naturaleza como en la sociedad, las esferas sociales son pequeñas cortes donde el humano se relaciona con otros, no hay un plan divino ya establecido que rija la vida de los hombres sino construcciones sociales que se alteran o modifican a cada momento todo el tiempo, yo protagonizo mi proceder en la vida y todo aquellos que pasa en mis esferas sociales es causa de la interacción con otros.

Los dioses en el éter sólo son alegorías improbables que el hombre débil requiere para conservar su ilusión de que a alguien más le importa un carajo su vida de mierda, o para relegar su responsabilidad por lo que hace o por lo que no puede controlar, diciendo así que esta es la voluntad de dios o la culpa del diablo.

EL SATANISMO NO ES IGUAL AL CRISTIANISMO

EL SATANISMO NO ES IGUAL AL CRISTIANISMO

Alberto A F. Reyes

Existen personas que se hacen llamar Satanistas, se acercan a grupos Satanistas, páginas, o grottos buscando respuestas ya resumidas, o buscando gurús espirituales que les guíen, maestros, o algo parecido. En realidad, el Satanismo no funciona así, podemos orientarte y mencionar qué libros recomendamos, porque ese es un principio básico del Satanismo, es decir la búsqueda de la sabiduría; y esa búsqueda es algo que uno mismo debe cultivar. Por otra parte, buscar o hacerse de maestros es una actitud mesiánica y contraría nuestro principio de libertad individual, pues necesariamente quien sigue a alguien más se somete a una voluntad ajena, eso es contrario a lo que el Satanismo precisa.

El Satanismo no es igual al cristianismo donde el cristiano, va al culto cada domingo, escucha a un hombre que hace del culto un buen negocio, influyendo en sus decisiones a partir del sermón dominical, donde jamás se leerá con profundidad la biblia abrahámica por error, o acerca de la religión que dicen profesar, porque el hecho de leer es una gran carga para su pequeño cerebro, prefiere divagar en frivolidades, pues es más fácil buscar temas resumidos o buscar a un "maestro" que le guíe en la vida. Apunto que si la mayoría de creyentes cristianos leyeran a profundidad la biblia, habría una cantidad considerable de ateos o agnósticos derivados de la lectura.

El Satanismo exige estudio, aquí no hay gurús, guías espirituales o maestros más allá del individuo, nadie te dirá "la verdad" o "la verdad oculta", el simple hecho de creer eso de que los Satanistas tenemos "el conocimiento oculto" ya es algo poco inteligente.

¿Quieres acaso el conocimiento oculto? Bien; compra libros, ponte a leer, investiga, has uso de tu razón, desarrolla tus propios criterios y descubre esa verdad, verás que tan oculta como supones no está, pues cualquiera con un gramo de voluntad puede investigar incluso en internet, y encontrar esa "verdad oculta".

RETORNO AL PASADO

RETORNO AL PASADO

Anton Szandor LaVey

Estoy viviendo en el pasado. No lo haría de ninguna otra manera. Dicen que nunca se puede traer de vuelta el pasado. Lo hago. Vivo en un museo. No soy lo suficientemente optimista como para pensar en cualquier cantidad de cosas que han sucedido vayan a traer el pasado de vuelta, eso lo sé. No me engaño a mí mismo. En el mejor de los casos, puedo utilizar las herramientas que ofrece la tecnología para recrear mi pasado. Y mi éxtasis arcaico.

Son las 6:30 de la mañana a mediados de noviembre. Estoy en mi cama elevada en la habitación roja. Aún está oscuro afuera, de cualquier manera. Estoy en lo alto de la esquina de la habitación, tumbado en mi cama elevada como una araña, escuchando la lluvia. Las persianas al lado de mi cabeza están abiertas, así que lo único que me separa del mundo exterior que gotea, es un viejo panel de vidrio. Mi habitación está en el segundo nivel de esta vieja casa oscura. Puedo mirar hacia abajo, al lado del camino está la pared frontal, hacia arriba en el tercer piso, el voladizo y hacia abajo un pasadizo que se dirige para afuera de la primera planta, con una puerta como pared. Es un lugar maravilloso para estar, aquí el tiempo se detiene... sólo la lluvia golpeando en la ventana a unos pocos centímetros de mi cabeza.

Anton Szandor LaVey conducting a ritual with a nude altar

Tengo en mi mano, como un melancólico, una vieja pistola... no es un modelo de frontera del tipo vaquero, pero es una elegante Colt calibre 32 automática; niquelada con su mango original de empuñadura de perla. Es casi como si la pistola fuera mi juguete favorito que tenía cuando era un niño, diseñada para parecerse a una verdadera automática. El arma que tengo ahora, paradójicamente, se parece a una pistola de juguete de los años treinta. Eso está bien si son la misma cosa en esta etapa del juego. Aquí estoy, cómodo, caliente y seguro bajo las mantas, sosteniendo mi brillante pistola de plata, en una vieja casa oscura con pasadizos secretos al igual que las viejas películas tipo B, mirando a la oscuridad y escuchando la lluvia que gotea.

Déjame decirte algo. Ahora me estoy haciendo viejo, con las actividades de mi vida tras de mí como norma de comparación. No me gustaría estar en otro lugar, ni en cualquier otra circunstancia. Mi negra existencia es volitiva. Estoy disfrutando de mi estado actual. No me podría imaginar uno mejor, un entorno más evocador del que ahora experimento. Quisiera aprovechar esta madrugada azotada por la lluvia, más que cualquier vuelo con personas agradables o lugares; un languidecido reposo en camas exuberantes en habitaciones de diseñador; rodeado de huríes que me acaricien, como en las fantasías de las revistas para hombres. No hay triunfos corporativos esperando para levantarme esta madrugada; ninguna reunión con ambiciosos hombres y mujeres influyentes; no hay almuerzos ejecutivos o paseos por el país, o discusiones sobre mis publicaciones.

Al parecer, tengo un problema. Se llama “satisfacción”. No es cierto que carezco de ambición. ¿Qué tipo de nuez puede encontrar total satisfacción acostado en una cama vieja, en una casa antigua, llena de cosas viejas, y mirando la lluvia? Te lo diré.

Hubo una vez que muchos niños deseaban poder vivir en una vieja casa, la correcta, como de una película de Bela Lugosi. Niños que deseaban una pistola de juguete, tanto como a una real; que deseaban salir de la escuela y quedarse en esa casa todo el día y leer, o construir maquetas de aviones. Lo sé. Yo era uno de ellos. El mío era un mundo de fantasía como un trueno rodante, más que las radios en el apartamento de al lado. “I Love a Mystery” y “Lights Out” tenían prioridad sobre Walter Winchell, al igual que mi entorno antediluviano, ahora rechazo cualquier preocupación por los acontecimientos de un mundo que se supone me concierne.

Mientras miro y escucho la lluvia de la madrugada, pienso en todas las personas desafortunadas que salen de sus camas para ir a trabajar y me da un control más estrecho sobre mi arma de cromo y me siento afortunado, más allá de lo que puedo describir. Puedo omitir el paso por la escuela. No he hecho ninguna cita para el día de hoy. No necesito preguntarme qué están haciendo ahora las personas pobres, porque soy rico. Viejo y rico. Llámalo “viejo rico”. Las vistas, sonidos y olores de mi infancia y adolescencia, me han hecho idear medios secretos para mantenerme. ¿O debería decir “botín”? Tengo infinitas riquezas a través de la abdicación y la autoexclusión. La mayor ganancia de riqueza de siempre estuvo ahí. Nunca me dejó. He construido sobre ella. De todos mis esfuerzos en la vida, era la más fácil.

LA POSIBILIDAD DE UNA VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE

LA POSIBILIDAD DE UNA VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE

Ashmeday Ben-Shakhar,4-12-1997e.c. (XXXII a.s.)

En la Biblia Satánica, Anton Szandor LaVey considera la posibilidad que el ego de una persona que haya disfrutado de nuestro mundo material a plenitud y que haya luchado hasta el fin para permanecer con vida, puede negarse a perecer junto con el cuerpo físico y seguir existiendo de manera independiente.

Sin embargo, muchos seguidores de Dr. LaVey creen, como buenos ateos, que no hay ninguna vida después de la muerte.

Pero, por otro lado, también hay miembros y simpatizantes de la Iglesia de Satán que no niegan la posibilidad de una existencia más allá de la muerte física, tal como se expone en la Biblia Satánica. Éstos consideran que el ego no es más que un campo energético producido por el cerebro y que una persona inteligente y orgullosa de si misma (que busca siempre su satisfacción física, intelectual y emocional, y que desarrolla al máximo sus talentos) posee un campo energético lo suficientemente fuerte como para poder sobrevivir la muerte del cerebro que lo creó.

Algunos van más lejos aún y no descartan la posibilidad de la reencarnación (que en la Biblia Satánica se considera más bien como una fantasía perjudicial), afirmando que esos hipotéticos campos energéticos podrían tener la capacidad de alojarse en un cuerpo nuevo luego de haber perdido su cuerpo original.

A modo de conclusión se puede afirmar que la existencia o no de una vida después de la muerte no suele ser uno de los temas principales que más preocupen a los Satanistas, debido a que no influye en nuestra manera de vivir (a diferencia de las religiones "normales", donde es uno de los puntos centrales); ya que un Satanista siempre intentará llevar una vida placentera y productiva independientemente de sus ideas sobre la vida de ultratumba; porque si no cree en ella, es lógico que intentará entonces sacar el mayor provecho posible de esta vida terrenal (que para él es la única); y sí considera posible una vida después de la muerte, supondrá que ésta sólo se puede alcanzar si se ha vivido como un auténtico Satanista.

Yo, por mi parte, pertenezco más bien al bando de los que piensan que un ego elevado puede seguir existiendo aún luego de la muerte.

¡Ave Satan!