Que los sueños tienen poder para advertirnos del futuro es una antigua idea, y los sueños precognitivos han jugado un importante rol en las antiguas civilizaciones. Sobre la base de un sueño, el destino de un país o estado podía ser formado. Los sueños sobre el futuro pueden ser simbólicos, deformados, o incluso altamente detallados y claros, pero es a menudo difícil, de antemano distinguir los elementos importantes del sueño. Hace unos pocos años, algunos amigos míos decidieron emprender un experimento de soñar el futuro. Planearon una visita a una ciudad que ninguno de ellos había visitado anteriormente, y entonces se esforzaron en soñarse a sí mismo allí. Una persona se observó viendo la recurrente imagen de un gato de cuello largo, sin poder figurarse lo relevante que sería para su vida. Cuando realmente visitó la ciudad, casi la primera cosa que vio después de salir del coche, fue una antigua tienda. En el escaparate estaba un modelo vidriado de un gato de cuello largo.
Sueño Lúcido
Una básica definición de un sueño lúcido es que tú sabes que al mismo tiempo que estás soñando - como si despertaras al conocimiento de que estás soñando. El término "sueño lúcido" fue acuñado en 1913 por un psiquiatra alemán, Frederick van Eeden. Examinando la incidencia de sueños lúcidos encontró que más del 50% de la gente había tenido al menos un sueño lúcido en su vida. Los sueños lúcidos son también distinguidos de los sueños ordinarios en que, cuando despiertas, hay mucho más sentido de continuidad desde el sueño, al estado de vigilia.
Acercamiento a disparar los Sueños Lúcidos
1. Incongruencia.
Los sueños lúcidos pueden ser disparados por el repentino reconocimiento de la imaginería incongruente dentro de un sueño. Por ejemplo, una vez soñé que estaba en una casa en la que no había vivido desde hacía una década. El sueño era perfecto en cada detalle, excepto que cuando miré a mis pies, vi que llevaba un par de zapatos que no tenía en ese tiempo. Esta incongruencia me sacudió hacia la consciencia de que estaba soñando.
2. Inducción Mnemónica de Sueños Lúcidos (IMSL)
Este acercamiento es hecho al despertar en la mañana temprano después de un sueño. Después de despertar, prueba a leer o andar por un rato, entonces acuéstate a dormir de nuevo. Imagínate a ti mismo soñando - ensayando los elementos del sueño que has tenido, y dite a ti mismo "la próxima vez que sueñe esto, recordaré que estoy soñando".
La lucidez puede también ser conseguida metaprogramándose uno mismo, que, si una imagen particular o escena aparece, esta disparará la lucidez, i.e. "Me haré lúcido cada vez que vea una esfera amarilla flotando hacia mí".
También es frecuente hacerse lúcido en un sueño cuando se realiza que se ha tenido el sueño antes, puede recordarse cómo se desarrolla, y no se quiere re-experimentarlo.
3. Vigilia Lúcida
Un psicólogo alemán, Paul Tholey, ha sugerido que si somos "lúcidos" cuando estamos despiertos, entonces quizá estaremos más lúcidos durante nuestra vida de sueño. Él sugiere que nos preguntemos a nosotros mismo muchas veces durante el día, "¿Estoy soñando o no?" No he encontrado a nadie que haya probado este método, pero la total determinación y persistencia que constantemente te recuerda esto cada día, podría actuar como una forma de autoprogramación.
4. Reconocimiento de una Imagen
El reconocimiento de una imagen o símbolo apareciendo en un sueño sobre el que uno ha meditado, puede disparar la lucidez. El brujo de Carlos Castaneda, Don Juan, aconseja a su estudiante aprender a mirar sus manos en el sueño, y de esa manera lograr lúcida consciencia del sueño.
Creación de un Tulpa de Sueño
Un "tulpa" es una forma de pensamiento conscientemente proyectada o servidor, que puede realizar una tarea particular para un mago o actuar como un "ayudante" general. Ellos son de una naturaleza similar a un Espíritu Forma de Deseo. Un Tulpa de Sueño toma la forma de un figura sombría - los chamanes tibetanos, de quienes el nombre deriva, a menudo proyectaban estas figuras en la forma de monjes - a quien deberías gradualmente comenzar a embellecer con rasgos con el tiempo. Por ejemplo, podrías dedicar algunos minutos trabajando con el Tulpa de Sueño cada noche. Tu meta debería ser no tanto imponer rasgos sobre la forma de sombra - sino permitirles surgir. Mentalmente nota uno o dos rasgos (escríbelos cuando puedas) y déjalo así. La próxima noche, puedes encontrarte decidiendo que el hombre lleva pesados anillos de oro en sus manos. El truco es permitir a la forma crearse gradualmente, tomando más detalle y "vida" propia, hasta que espontáneamente cruce dentro de tu experiencia de sueño.
Saber que has soñado con el Tulpa, es en sí mismo un gran paso adelante. Si puedes alcanzar esa fase, entonces puedes considerar trabajar con el Tulpa conscientemente, en despierta, semi despierta, consciencia en el sueño, o guiarte en viajes a diferentes reinos en las tierras del sueño. Es importante que construyas una relación de confianza con el Tulpa, que le reconozcas como una entidad individual, a pesar de que tú eres responsable de él.
